* De nuevo pedaleando, entre el caos de las bolsas y las economías mundiales, seguimos haciendo nuestro camino.
* Estos días atrás, la primera quincena de agosto, me he dejado caer con la bicicleta, sin pedalear, dejando que el paisaje y el tiempo me acariciaran la cara, periodo de dulce pendiente a favor, donde no es necesario darle a los pedales, hasta el siguiente repecho, que llega mucho antes de lo que quisiéramos.
* Hay que cosas que una vez aprendidas nunca se olvidan, capacidades y habilidades innatas, que siempre nos acompañan. Ahí están en el fondo de nuestro bagaje, listas a ser utilizadas una vez más.
* Ferias, playas, risas, juegos... en definitiva el material con el que están tejidas las infancias felices, hay que seguir tejiendo, antes de que la bici de la niñez de mis hijos, se vaya quedando sin frenos.
* Peticiones imposibles, deseos ingentes, emociones inusitadas...realidad inmutable.
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